Thursday, July 19, 2007

The Detroit Cobras - Tied & True.
No me puedo acordar si ya he hecho alguna crítica de algún disco de esta excepcional banda. Rock 50toso con mezclas de un punk suavecito.
Un cañon terrible disparado por la potente y sensual voz de Rachel Nagy, una ex stripper que tiene lo que se dice: “Una bocha de roncanroles encima”.
No sé bien cuantos discos tienen antes de éste ya que editaron lp´s, ep´s, maxi´s, compilados, reediciones y otras yerbas. Este es el último de estudio.La banda en comparación suena más moderna, se ve que han orientado el timón de su descontrolada barcaza musical hacia un sonido mas Strokes, pero manteniendo el sonido rocabilly o “rock de antes” lo cual moderniza sin cambiar drásticamente la banda.
Rachel sigue vocalmente impecable, lo cual aunque suene tonto es una buena noticia ya que esta mujer es uno de los últimos estandartes del rock salvaje.Y me refiero a salvaje por el hecho de naturaleza salvaje y no de “me hago la salvaje para vender discos”, como la idiota de la viuda de Kurt Kobain que da más lastima ultimamente que buenos discos o la retardada de Britney que se pela la cabeza y se mete en una clínica (¿Mi odio por BS ya es crónico?).
Si no conocen esta banda pruebenlá, les va a gustar porque es de la buena y es 100% pura, actitud. Como era antes. Como debería ser el rock and roll y no cinco fumetas rollingas que se estan haciendo millonarios vendiendo remeras y despues se la van de pibes de la calle.
El rock también es sangre y sudor. Desastre y error. Actitud y garra. Prostitución y vagancia. Uh perdón ese último era el nombre de un disco del hermano sin talento de Andrés Calamaro. Pero bueno, peor era Mambrú.
Skay Beilinson y los Seguidores de la Diosa Cali -La Marca de Caín..

Parece que han pasado siglos desde el último disco que comenté y denuncio que eso se debió a la escasez de sorpresas musicales que es moneda corriente en el rocknacional con bandas que ya están practicamente dejando de grabar en estudio para “vivir del vivo”. De la escena internacional mejor ni hablar, es más, hasta que Britney Spears no vuelva de la falopa creo que no va a suceder nada interesante.
Bueno, disco nuevo de Skay. A ver.
No se despega mucho de los anteriores pero este, para mí, a diferencia de sus antecesores tiene más luces y más brillos. A veces un aire oriental y un poco más de cuelgue. Climas, rock, letras muy bien organizadas y ritmos variados que conforman las celulas de un organismo con el sello de garantía de talento Skay.
No pienso hablar de los redondos y esa sarasa. El tipo ya tiene una institución propia, cada vez esconde menos la voz tras velos tecnológicos lo que manda al frente a un personaje con personalidad. Hablar de madurez en un músico fundamental en el rock nacional es una idiotez pero si digo que está llegando a el ideal de su carrera solista capaz que no le pifio tanto.
Abre la cancha a nivel mezclas con un disco menos maquinoso y mas guitarrero sin caer en un disco rock obvio.
Recomendado: la canción de cuna para el niño robot.
Un disco de esos que se dejan puesto del track 1 al 10. Dá para comprarlo y eso en el rock nacional de hoy en dia es más que elogiable.
Pd: ¿Tengo que decir que el arte lo hace Rocambole y que el laburo de violas de Skay es impecable?